El negocio ganadero argentino vive un punto de inflexión. Lo que durante décadas dependió del martillo en un remate físico hoy se decide, cada vez más, desde un celular. Frigoríficos, supermercados y productores están migrando a modelos digitales para comprar y vender ganado, en un cambio que reordena la estructura de costos, los márgenes y la forma de gestionar toda la operación.
Uno de los actores que impulsan esta transformación es deCampoaCampo, una plataforma que concentra un volumen creciente de operaciones online y refleja el nuevo pulso del mercado. Según explica su CEO, Emilio Herz, el proceso ya no es una promesa de futuro: “Lo online dejó de ser una tendencia a largo plazo, es el presente del negocio ganadero. Vemos un cambio profundo, impulsado por nuevas generaciones que priorizan conectividad, información inmediata y flexibilidad”.
Los números dan cuenta del fenómeno. Solo en lo que va de 2025, más del 60% de los frigoríficos que operan a través de la plataforma realizaron compras exclusivamente online. Hoy deCampoaCampo registra más de 40.000 cabezas comercializadas por mes, reúne a 150.000 usuarios activos, emplea a más de 150 personas y trabaja con una red de 75 transportistas, lo que permite bajar los costos logísticos y llegar a cualquier punto del país.
“Antes, toda la operatoria estaba atada a la feria, con sus gastos, plazos largos y riesgos. Ahora el productor puede elegir cómo y cuándo vender, fijar el plazo, el precio y manejar toda la documentación sin salir del campo. Es un salto enorme en eficiencia y transparencia”, explica Herz.
En este nuevo esquema aparecen como compradores principales grandes cadenas de supermercados que encontraron en el canal digital la posibilidad de acceder a una oferta más amplia, con datos precisos y costos de intermediación más bajos.
Pero el cambio no termina en el momento de la compra. Para Herz, uno de los impactos centrales está en la estructura de rentabilidad del negocio. “La reducción de costos logísticos y comisiones es evidente. Pero además, ahora el productor tiene un control financiero que antes no existía. Puede definir sus propias condiciones comerciales y hasta cobrar desde que carga el lote”, subraya.
Esa dinámica es posible gracias a herramientas como deCampoPagos, la billetera virtual que le permite a miles de productores gestionar pagos de servicios, plazos y disponer de su saldo en forma inmediata. Una innovación que apunta a cortar con la lógica de largos tiempos de cobro, habitual en un sector donde el capital de trabajo suele ser una traba.
El avance digital también transformó el tipo de empleo que genera el negocio ganadero. La plataforma cuenta con equipos que integran desarrolladores, veterinarios, técnicos agropecuarios y perfiles comerciales. “El diferencial está en poder auditar la sanidad, garantizar toda la documentación y a la vez conectar eso con tecnología. Eso da seguridad al comprador y también al productor”, destaca Herz.
Con más de 3 millones de cabezas operadas desde su creación hace 15 años, bajo el paraguas de Pedro Genta y Cía, consignataria con más de un siglo en el rubro, la compañía proyecta seguir creciendo con nuevos servicios financieros y alianzas tecnológicas que permitan ampliar el alcance del modelo. (Ambito).
