YPF invertirá US$ 5.000 millones este año, destinando el 66% de ese monto a impulsar la producción en el megayacimiento de Vaca Muerta.
El presidente de la compañía, Horacio Marín, confirmó la cifra durante el Foro Económico Internacional de Latinoamérica (IEFA), donde presentó un panorama optimista para el sector.
Además de la expansión en Vaca Muerta, YPF retomará una política de los años 90 implementada por José Estenssoro: otorgar becas a empleados para cursar posgrados en Estados Unidos. En esta nueva etapa, el foco estará en la inteligencia artificial, con al menos 10 trabajadores capacitados anualmente, una estrategia similar a la que adoptó Chevron para atraer talento en un mercado cada vez más competitivo.
Actualmente, YPF produce 280.000 barriles diarios, de los cuales 160.000 provienen de la cuenca neuquina. Se proyecta que la producción en Vaca Muerta alcance los 200.000 barriles diarios para fin de año.
Del total extraído en el yacimiento, 41.000 barriles diarios se exportan a Chile, consolidando a YPF como la principal exportadora del país. Otros 100.000 barriles viajan por el oleoducto Oldelval hacia Buenos Aires para abastecer la refinería de La Plata, mientras que el resto se destina a la planta de Luján de Cuyo, en Mendoza.
Como parte de su plan estratégico, YPF invertirá US$ 1.000 millones en la modernización de ambas refinerías, con el objetivo de reducir la presencia de azufre en la nafta y el gasoil.
A partir de 2026, la compañía apunta a convertirse en una empresa 100% no convencional, es decir, con toda su producción proveniente de Vaca Muerta. La industria en su conjunto prevé alcanzar los 1,5 millones de barriles diarios en la región para 2030, con exportaciones de un millón de barriles, lo que representaría ingresos por al menos US$ 22.000 millones si el precio del crudo se mantiene en torno a los US$ 60 por barril.
En materia de gas licuado, Marín destacó que Argentina ofrece precios competitivos, rondando los US$ 3 por millón de BTU, similares a los de Estados Unidos, pero con ventajas logísticas que permiten llegar a Japón 14 días antes que los envíos norteamericanos.
Tras sumarse a proyectos de Gas Natural Licuado con Pan American Energy (PAE), la noruega Golar y la angloholandesa Shell, YPF avanza en una tercera iniciativa que podría anunciarse en los próximos meses. Según Marín, este desarrollo surge del interés de empresas y gobiernos de Asia y Europa en un nuevo proveedor energético confiable y competitivo.
«En dos meses podríamos estar haciendo un anuncio muy importante en este sentido», adelantó el presidente de YPF, quien destacó el potencial de Argentina como actor clave en el mercado global de energía.
